Los productores familiares son menos conocidos que las grandes Maisons, pero su producto es igual o mejor
La elaboración del Champagne es un arte complejo que exige del dominio de técnicas minuciosas por parte de los viticultores, transmitidas de generación en generación. Y qué mejor ejemplo que los “vignerons independants”. Son pequeños productores de vino que elaboran su producto a partir de las uvas que obtienen del cultivo de sus propios viñedos.
Una buena opción es acercarse a la propiedad de algún productor; la mejor manera de descubrir todos los secretos que envuelven el mundo de los viticultores. Y es que La Champagne tiene una gran región repleta de viñedos y bodegas.
Explorando viñedos y bodegas…
Más de 600km de carreteras señalizadas conforman la Ruta Turística del Champagne, un itinerario en el que poder explorar las riquezas vitícolas de esta región y descubrir las 4 grandes zonas que se diferencian entre ellas por su personalidad propia y sus cepas. Adentrarse en ellas y recorrer sus viñedos, las bodegas y algunos de los pueblos más pintorescos es un plan perfecto.
- Montaña de Reims
- Côte des Blancs y Sezanne
- Valle de la Marne
- Colinas de Vitry

- Son siempre bodegas familiares
- Viñedos propios donde se busca la máxima calidad de la uva
- El reflejo único y expresivo de este territorio con la denominación Champagne
- Gran diversidad: unos 5000 vignerons forman parte de este sello
De esta manera, es fácil reconocer sus productos porque las botellas están marcadas con la etiqueta Champagne de Vigneron. Estos champagnes se pueden encontrar principalmente en las propias casas de los viticultores y en menor medida, en grandes superficies.